Kai no dejo ir a Raquel en toda la noche, no se detuvo hasta el 8 round, se quedaron dormidos, por la mañana eran las 7 am cuando Raquel se levanto y levanto alarmada a Kai, tenia 2 horas para llegar a su casa y alistarse.

Kai dejo a Raquel en el café donde había dejado su auto, gracias a dios ahí estaba no se lo había llevado la grúa. Kai la había seguido hasta su casa, en cuanto se bajo recibió una llamada, tenía que irse.

Raquel entro sigilosamente a su casa, reviso por todos lados Karo ya no estaba. Siguió con confianza,  tomo una ducha rápida,  se arreglo y cuando bajo a la sala iba entrando Karo. Se asusto

-¿Tu tampoco viniste a dormir?– Le dijo alarmada Raquel, Karo se soltó riendo

–No yo si dormí aquí, ya iba caminando a la universidad pero m regrese porque se me olvido mi celular– Lo tomo de la barra. –Tú que eres una pilla que no dormiste aquí, ¿dónde estabas?–

–Ahhh– dijo nerviosa– En casa de… una amiga que vive a las afueras en una casa grandísima que tiene en el bosque– Eres una gran mentirosa, pensó Raquel.

–Hay, ¿porque no me invitaste?– dijo Karo haciendo un puchero

–Porque tú estabas en una cita, ¿lo recuerdas?

–Oh sí, es verdad– Dijo Karo suspirando

–Oh, ¡¡ese suspiro!!– Dijo Raquel sorprendida– Me recuerdas a mí la primera vez que me enamore, cuéntame que paso en esa cita.

–Ahorita no podemos, tenemos que ir a la uni–

–Oh, cierto. – Dijo Raquel que tomo sus cosas y salieron.

Pasaron todas las clases y cuando salieron, se estaban subiendo al carro cuando Karo recibe una llamada.

–Raquel, me voy, Sandeul me está esperando allá– dijo señalando un auto rojo deportivo. Mientras sonreía.

Vio como Karo casi corrió al auto, saludo al chico y subió al auto. Raquel encendió el auto y partió a su casa, antes llego al súper mercado a comprar la despensa.

Cuando llego a su casa, vio a Kai en el sofá sentado.

–Tú, ¡¿Qué haces aquí?! ¡¿Cómo rayos entraste?!– dijo enojada

– ¿Recuerdas ayer? Cuando le dijiste a tu amiga donde estaba la llave, yo estaba ahí contigo.

– ¡Aish! ¿Y cómo sabias que iba a venir sola?

–No lo sabía– respondió Kai encogiendo los hombros.

Raquel dejo las bolsas en la mesa y fue hacia Kai

–Kai, por favor, puedes retirarte, recuerda que yo no vivo sola. – el hizo caso omiso a lo que ella le dijo– Kai por favor, discúlpame si soy grosera pero esto no es algo de lo que deberíamos estar orgullosos– el solo seguía mirando a frente, ella lo tomo de los brazos para quererlo levantar, lo cual no funciono en lo absoluto,  al contrario eso le sirvió a él, para jalarle y que cayera encima de él

–Lo siento Raquel es que no puedo contener mis sentimientos, mucho menos estos impulsos, el deseo hacia ti, desde que te vi, me enamore perdidamente de ti, pero tú solo tenias ojos para Taemin, moría de coraje, de celos, pero él es mi mejor amigo, quien mejor para que estuviera con la mujer de la cual estoy enamorado que mi mejor amigo– Raquel solo se quedaba callada, y agachaba la mirada, él la empujo hacia un lado cayendo en el sillón, el se puso encima de ella y comenzó a besarle el cuello– Discúlpame, por esto que hago, pero es que te amo– le dijo susurrándole muy cerca de su oído, haciendo que ella se estremeciera.

Ahí estaba ella inmóvil, sorprendida por las palabras de Kai, el de nuevo comenzó a besarla ella por instinto  rodeo su cuello con sus brazos.  Kai se sentó en el sillón y Raquel sobre él, sus cuerpos estaban tan juntos. Kai comenzó a besarle el cuello salvajemente dando besos y pequeñas mordidas, sin dejar rastro, por su cuello. Metió sus manos dentro de la blusa de Raquel, pero le estorbaba, mejor se la quito, Raquel también le quito la playera a Kai. El tomo con sus dos manos sus senos apretándolos, mientras se besaban en ese momento abren la puerta de su departamento.

Era Karo que quedo en shock cuando los vio, a los dos, besándose y Kai con las manos en la masa.

–Ehh… L-lo…s-siento debí tocar–dijo nerviosamente dándose la vuelta y saliendo de la casa, mientras Raquel tomaba su blusa y se la ponía, salió detrás de Karo.

– ¡Karo! No es lo que parece, bueno si es ¡pero no!– le dijo mientras subía de regreso al auto de Sandeul

–Sandeul, ¿estás ocupado? Me puedes llevar algún otro lugar, llegamos en un momento muy incomodo– Dijo Karo sonrojada y nerviosa

–Está bien no  tengo nada que hacer– pero volteo a ver qué venia Raquel, y le hace señas a Karo, para saber si la esperaba o arrancaba

–Vámonos no la esperes– le dijo Karo, Sandeul arranco dejando a Raquel parada en la banqueta.

Kai salió de la casa, Raquel le pidió que por favor se fuera que dejara a ella hablar con Karo tranquilamente.